REDACCIÓN.- Michelito Lagravere cortó dos orejas y rabo a un novillo de 320 kilogramos en la plaza de toros de Cancún en el primer festejo taurino de la Feria de los Colonos 2009.
El diestro que apenas cuenta con 11 años de edad, dictó cátedra de bien torear y como pasaportó de certera estocada al novillo de El Cerrito se le otorgaron los máximos trofeos. Fue coreado el ¡Torero! ¡Torero! y al final los aficionados lo pasearon a hombros.
Entrada pletórica y el ruedo también lució un lleno impresionante pero no de aficionados, sino de una inteligencia torera, valiente y artística del esteta que esta asombrando a todos los públicos del país.
El astado de El Cerrito no fue una perita en dulce, pues fue manso y peligroso y así trajo de cabeza a la cuadrilla que como pudo adornó el morrillo en el segundo tercio.
Michelito inició su labor con cuatro y hasta cinco verónicas que remató con una media de cartel.
Luego de solicitar venía a la máxima autoridad en el coso, brindó la muerte de su novillo a su hermano André que también es torero y que estaba cumpliendo sus primeros 10 años de vida.
Con la muleta sus recorridos por derecha fueron de alto sentido del temple y mando y así fue como engarzó tandas que levantaron a los aficionados de sus asientos.
Derechazos, molinetes, pellizcos sensacionales con los de trincherilla y que decir en los forzados de pecho que encendían los ánimos.
El novillo por momentos negaba las embestidas, pero el niño sensación del toreo, luego de trabajar el primero le dejaba la muleta en la cara y tiraba de él para un segundo y tercero y cuarto de arte puro.
Michelito se presentará el próximo domingo en la plaza Monumental de Playas de Tijuana y lidiará dos erales de la ganadería de Marrón (Carazo).
